Así es como funciona esto. Yo señor del IBEX necesito pasta, se lo digo a mi siervo que es el político de turno, que consciente de su propia inutilidad sabe que necesitará un puesto cuando salga de politiquear para estar el resto de su vida tocándose lo huevos. Por otra parte el político se lo dice a su siervo que es el director de un medio de comunicación que se arrastraría por el desierto del Sahara, despediría a 300 becarios y periodistas con ética si el político lo pidiera para poder pillar cuanta subvención sea posible. Este último creará la campaña favorable de opinión a determinadas medidas e intoxicará cualquier intento de explicación de la realidad, llamemosle directamente ROBO que es lo que es.  En este caso además se le unió un supuesto narco-político tan necesario en estos casos. Estos que apañan tanto un roto como un descosido.

La localidad coruñesa de Cedeira, actualmente en fiestas, ha sido el escenario este mediodía de una comida a cuatro bandas en un reservado del restaurante El Badulaque. A la mesa, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy; el del gobierno gallego y delfín ‘popular’, Alberto Núñez Feijóo; el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, al frente también de ACS, constructora con intereses en adjudicaciones públicas, y el director de ABC, el gallego Bieito Rubido, natural de Cedeira y bien relacionado con el inquilino de la Moncloa.

La cita ha tenido lugar apenas una hora y media después de que Rajoy compareciera en una breve rueda de prensa en la localidad coruñesa de Ordes, donde se ha felicitado por las “explicaciones” del ministro del Interior sobre su polémica cita con Rato y ha aprovechado para volver a elogiar a Núñez Feijóo como “el mejor candidato a la Xunta en 2016”, que, sin embargo, no estaba presente en el acto. Feijóo, como se vio posteriormente, le esperaba en el Badulaque.
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