En las últimas décadas, sólo los países en vías de desarrollo y con enormes dosis de inversión pública han conseguido rentabilizar los Juegos Olímpicos a largo plazo. El impacto en las economías desarrolladas suele ser negativo o neutro en el mejor de los casos. Ésta es la huella que ha dejado en la economía el mayor evento deportivo del planeta a lo largo de los últimos 50 años.
Javier Ruiz
La idea de que tras el oro olímpico los juegos llenan también de oro las arcas públicas es un mito que se instauró en 1964 cuando Tokio utilizó esa cita para reconstruir el país tras la Segunda Guerra Mundial. El crecimiento de su economía saltó hasta el 26,1%.
Pero desde entonces, sólo dos países han conseguido rentabilizar la cita olímpica. Los principales académicos del mundo concluyen que los juegos de la era contemporánea sólo han sido rentables en dos ocasiones en 50 años. Sólo han conseguido beneficiarse los países en desarrollo y, sobre todo, dispuestos a gastar enormes sumas de dinero público en infraestructuras.
Los países ya desarrolladospueden contar con un impacto neutro en el mejor de los casos o con pérdidas milmillonarias como las que sufrió Grecia en Atenas 2004. Los efectos para los países desarrollados son, según los expertos, mínimos y pasajeros.
Éste es el análisis del impacto que cada cita olímpica ha tenido en el país que la acogió antes, durante y después del evento en las últimas cinco décadas…TEXTO COMPLETO