Las medidas de retirada de liquidez llevadas a cabo por el BCE, con una caída del 48% en los préstamos a largo plazo desde junio de 2009, más las tímidas subidas de tipos, han hecho que en abril la tasa de aumento de la M1 sea la menor desde abril de 2008 (+1.7% interanual), y que la M2 y la M3 aumente también a menores tasas que en marzo (2.4 y 2.0% respectivamente). Como se aprecia en el gráfico, el aumento de la masa monetaria es muy pequeño si se toma una perspectiva histórica, por lo que las presiones inflacionistas claramente no vienen por esa vía, sino que son debidas a los aumentos de precios de las materias primas.