El gráfico es elocuente. Representa la relación entre el total de deuda en los EEUU (publica y privada) en relación con el PIB, lo bueno es que tanto la deuda (numerador) como el PIB (denominador) estan expresados en dólares, con lo que el gráfico está totalmente libre de cualquier distorsión por inflación o deflación. Esto solo puede acabar de una forma y creo que la única cuestión es cuando.
Por cierto, para los inflacionistas: Oberservad el nivel de deuda que había en 1970. Cuando el nivel de deuda es bajo el escenario de inflación es mucho más factible, ya que hay mucho margen para crear nueva deuda y monetizarla. Cuando el nivel de endeudamiento es tan alto, es poco probable esperar una inflación o hiperinflación porque es muy dificil ya generar nueva deuda que monetizar y sobre todo, que cuanto más deuda hay creada más amortizaciones se generarán, y más dificil es que crezca el nivel de deuda global.
La consecuencia más probable de la gran burbuja de crédito que refleja este gráfico es una fuerte contracción del crédito, es decir: deflación.
Hola Manuel:
Supongo que él gráfico será en dólares constantes ¿no?
Un saludo
No, se calcula con dolares corrientes. Pero la gracia del gráfico es que al ser un ratio Deuda/PIB y ambos están denominados en dolares, las fluctuaciones del dolar no afectan, porque el efecto distorsionante del dolar queda neutralizado al estar en el numerador y en el denominador.
Estimado Manuel,
no es posible la hiperinflacion si se eternizan los megarescates financieros ?
muchas gracias por su respuesta
Entiendo que si, también sería posible que hubiese hiperinflación modificando el sistema monetario actual, de forma que puedan emitirse dolares sin ningún tipo de respaldo. En cuestiones políticas todo es posible.
Partiendo de la base de que todo es posible, yo trato humildemente de pensar que es lo más probable. Y soy consciente de que en este ejercicio es muy fácil equivocarse.
Dicho esto, mi opinión es que no creo que haya “aguante” por parte de los contribuyentes para muchos más rescates. Y lo digo en especial por el contribuyente americano. En Europa tenemos muchas más tragaderas, excepto Alemania, que es quien más tiene que decir en estos asuntos.