ATENAS
La evolución de los acontecimientos en Grecia tiene características muy parecidas a las que se registraron en Alemania en 1933 o en Argentina durante el bienio 1974-76. Tras reportar resultados excelentes en las elecciones legislativas de Junio Amanecer Dorado ha adoptado iniciativas populistas, como la distribución periódica de comida o ropa y la búsqueda de empleo para los necesitados de nacionalidad griega, que han permitido a la formación neonazi incrementar el favor de los votantes. Según los últimos sondeos, la extrema derecha se situaría en tercera posición superando el 10% de los sufragios, pero hay quien sostiene que pueden alcanzar hasta el 20%. Uno de los objetivos principales de Amanecer Dorado es la penetración ideológica en los centros educativos donde, a veces, los escolares utilizan un lenguaje y formas de actuar propias del partido neonazi. Es cada vez más patente la marginación del alumnado de origen extranjero, aunque las asociaciones de padres y de estudiantes han preferido – hasta la fecha – no poner en evidencia estos hechos lamentables por miedo a eventuales represalias. Un artículo aparecido el domingo en la edición digital del periódico “Έθνος της Κυριακής” (pron. Ethnos tis Kyriakís) destacó que en las paredes y en las aulas de los colegios asumen una presencia notable lemas en favor del odio racial, del fascismo y de la superioridad de la etnia griega. Además, el diario relata una serie de testimonios como él de la profesora Zajaroula Dale que enseña en un instituto de educación secundaria de Atenas: “Para la fiesta del 28 de Octubre – día en que se conmemora el rechazo del gobierno griego a la pretensión de Mussolini de invadir el País – organizamos una exposición fotográfica y según las instrucciones que nos dieron, el tema de la muestra tenía que ver con todo lo que sucedió en Grecia durante la Segunda Guerra Mundial. Había también retratos de héroes de la resistencia como Aris Veloujiotis o Napoléon Zervas. Al verlas, algunos escolares empezaron a gritar en voz alta que dichas imágenes tendrían que desaparecer y que no permitirían que el comunismo hiciera prosélitos en los colegios”. De todas formas, la situación ya es alarmante puesto que, según el órgano de información, empiezan a ser numerosos los casos de polarización ideológica en los centros educativos. En la ciudad cretense de Réthymno, algunos estudiantes apalearon a un compañero que había participado en una manifestación antifascista. En Patras, la tercera ciudad del País, siete escolares no participaron en la conmemoración del aniversario de la revuelta de la Escuela Politécnica de Atenas – ocurrida en 1973 – contra la dictadura militar porque, a su juicio, no hubo ningún muerto. En la isla de Lefkada, una maestra que trabajaba en un centro de educación infantil fue acusada de “actividad antipatriótica” por Konstantinos Barbarousis, diputado de Amanecer Dorado, por haber permitido a los niños dibujar banderas albanesas en vista de la fiesta del 28 de Octubre. Durante el més de Septiembre, una profesora de un centro en la isla de Jíos explicaba a los alumnos los peligros del fascismo. El diario “Στόχος” (pron. Stójos) – esa publicación se distingue por su apoyo a la dictadura militar griega – publicó todos sus datos aconsejándole que no repitiese dichos conceptos. En la ciudad de Iráklio, capital de la isla de Creta, dos miembros de un consejo escolaron criticaron al profesor encargado de preparar las celebraciones para la fiesta del 28 de Octubre porque no había dado relevancia alguna a los logros del régimen fascista de Ioannis Metaxás (1936-1941).
¿Hasta cuando permitiremos todo eso?