Queridos lectores,
Numerosos compromisos me han mantenido lejos del blog, y ahora se me acumulan los temas que desearía comentar. Hoy haré un post breve, y en próximos días espero poder ir sacando el resto (que es bastante sustancioso).
Hace unas semanas leía esta noticia en El País: “PRISA prevé triplicar el beneficio este año y reducir el endeudamiento“. Si siguen el enlace verán que el grupo PRISA (editor de entre otros, de el diario El País, el de mayor tirada en España) prevé que, con 150 millones de euros, en 2010 triplicará su beneficio con respecto a 2009 (que fue de 50), y no sólo eso si no que prevén que en 2011 sea cinco veces el de 2009, o sea, 250 millones de euros. Esto podría tener sentido en un contexto de recuperación económica posible, pero dado el futuro al cual nos encaminamos es un brindis al sol, si no una inconsciencia temeraria. No tienen más remedio: PRISA tiene una deuda que, tras deshacerse de varios activos, quedará en 3.000 millones euros, e incluso con estas estimaciones tan fabulosas y aunque destinaran todo su beneficio a repagar la deuda y que ésta no tuviera interés les costaría 12 años devolverla.
Es evidente que PRISA no podrá devolver este préstamo. No quiero entrar a valorar si la estrategia empresarial que ha seguido ha sido acertada o equivocada, a pesar de que parece que algunas compras que hicieron han terminado por indigestársele. Lo que me parece importante destacar es que, en una situación de recesión permanente, PRISA va a hundirse, irremisiblemente. Como seguramente le pasará a otros grupos de comunicación, tarde o temprano, sobre todo si los supervivientes se lanzan a fagocitar los restos de los que caigan. Esto me lleva a la reflexión fundamental del post.
En medio del descenso de la energía, la falta de recursos y de capital, la información comenzará a escasear. Cada vez sobrevivirán menos medios de comunicación, que para recortar sus gastos disminuirán el número de corresponsalías, reducirán el número de páginas, etc. Eso en un contexto en el que las compañías contratarán cada vez menos publicidad y en el que seguramente el número de lectores caerá, con lo que los problemas se recrudecerán. Eventualmente, quedará algo de espacio para medios locales y las noticias de lugares más lejanos llegarán cada vez más con cuentagotas. Tampoco importará, porque la gente tendrá ocupaciones más urgentes y cercanas. Lo que sucede es que dejaremos de tener una noción clara del mundo, que cada vez entenderemos menos lo que está pasando. Ya sé que muchos de mi lectores argumentarán que igualmente no hay mucha información fiable hoy en día y que la agenda mediática está completamente distorsionada, pero esto de lo que hablo es mucho peor: es que no habrá qué distorsionar, y ni siquiera podremos leer entre líneas.
Nos queda, claro está, la opción de internet. Si es que la falta de energía no provoca caídas continuas en la red… Es por eso que quizá ahora se debe hacer un esfuerzo para crear medios para mantener el flujo de información, porque en el período tan confuso que vamos a vivir la falta de información que se pueda difundir a gran escala puede crear fricciones entre diferentes comunidades, ya que tendrán percepciones distintas de la realidad en función de su situación local. Mientras tanto, intentemos aprender y comprender tanto como podamos.
Espero volver en pocos días. Salu2,
AMT
Está claro que, cuando falte la energía, el último plató que se cierre, será el de “sálvame”.
La reducción de corresponsalías, reducción de papel, preponderancia de las noticias locales y de sucesos es anterior a la crisis energética: tiene que ver “con lo que enseñan” estos medios: noticias intranscendentes, crímenes para aterrorizar al personal, visiones tópicas de los otros países… Para eso con una silla en la redacción y una agencia de notcias tienes más que suficiente.
Visiones tópicas de otros países… y del propio, porque con procesiones, tauromaquiavélicos y ronaldos ya tenemos forjado todo lo que un españolito debe tener en el cerebro. Pero aún hay otro componente de la prensa local o regional que llena muchas páginas: los comunicados de prensa de los mil-y-un departamentos oficiales. ¿No podría servir esto al menos para prescindir del gasto en publicidad institucional? Por favor: ¡un Ministerio para el Ahorro en Publicidad YA!
Un artículo relacionado del Energy Bulletin: El colapso del periodismo y el periodismo del colapso. La primera parte es la más interesante: argumenta con cifras que la información es menor y de menor calidad desde hace ya algunos años. En:
http://www.energybulletin.net/node/52171
Porque la gente prefiere vivir en otra Tele-Realidad que en la vida misma (por eso la informacion es menor y de menor calidad y triunfa la basura). Que Prisa se hunde… se lleva ya hundiendo hace tiempo. Que pasara sin “Prisa”? pues que iremos mas “Despacio”?, poca cosa creo yo. Es un grupo de comunicacion que ha ido perdiendo “credibilidad” y “objetividad” si es que existen en algun panfleto que se publique. Tenian que cambiar el nombre de la carrera de Periodismo por “servilismo” a algun poder. Al menos cuando alguien ve “Salvame” sabe que ve basura.
Y hablando de El País: ¿es esta noticia buena, en realidad?.
En España desaparece CNN+, una cadena de noticias que hace años tuvo bastante prestigio. Se reorganiza el panorama televisivo, con varias fusiones (que en realidad son absorciones). Se tiende a la ligera del contenido y se huye de los formatos más originales o críticos. El proceso continúa…
Comentando en post tan antiguos nadie te va a seguir la pista porque dudo que sepan para que sirve la columna de Recent Comments.
CNN+ tuvo cierto prestigio, es verdad, hasta que se ha ido quedandose anclado en un esquema “obsoleto”. Si a esto añadimos a un gran comunicador como Iñaki Gabilondo, que todo lo que toca lo convierte en “barro”, fin de la historia. Me aburrian sus sermones cuando estaba en cuatro y me aburria las pocas veces que le vi en CNN+.
un saludo
“Comentando en post tan antiguos nadie te va a seguir la pista porque dudo que sepan para que sirve la columna de Recent Comments”
Me gusta pensar que, al menos los lectores de este bloc, no somos tan tontos.
Excelente labor de seguimiento Antonio.
Damià
Hombre, se siguen facilmente, al menos mientras el numero no sea masivo. Además es un buen medio de organizar la información. Y aunque alguien llegue tarde al blog puede leer comentarios actualizados. Esta bien.
Sólo es un caso más de las restructuraciones en medios de comunicación de hoy en día, pero dado que hemos hablado tanto del grupo Prisa está bien hacer el seguimiento: El Grupo PRISA reducirá un 18% su plantilla.
La cadena Veo 7 despide a cerca de 100 trabajadores. En El País.
Las tribulaciones del grupo PRISA (editor de El País). En hispanidad.com.
El diario español Público entra en concurso de acreedores. Comunicado de sus trabajadores.
Compartiendo la idea general se expone en este post, quiero sin embargo matizar que, en el caso concreto de España y PRISA, va a ser difícil que esa empresa en concretio desaparezca salvo que caiga la monarquía, puesto que precisamente fue creado en 1976 para tal fin (y no para ganar o perder dinero), ser el bastión informativo del “democrático nuevo régimen” que se albiraba tras la desaparición de Franco, y con implicación directa en su accionariado de notables personajes de la nobleza (el sr. Areilza entre otr@s, si no me falla la memoria)
Como curiosidad, comentar que ya en el siglo XIX hubo en España un periódico denominado igualmente EL PAÍS, igualmente defensor a ultranza de la España Una, Monárquica y Borbónica, y que desapareció, si no me equivoco, justo con el advenimiento de la II República.
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