Creo que la crisis es lo mejor que nos ha podido pasar si la entendemos como el freno a todo lo que estaba sucediendo. Me refiero claro está, a la degeneración moral a la que se estaba sometiendo a la sociedad desde las propias instituciones encargadas de velar por todo lo contrario ¿Como se ha llegado a este punto? Sin duda o con ella, la realidad nadie la puede cambiar, hemos visto como se ha ido destrozando un país con el visto bueno de todas las instituciones, unas por activa, el gobierno y los gobiernos autonómicos, y otras por pasiva, la justicia y todas aquellas que tenian la potestad del ejercicio del control, desde los interventores municipales hasta los Tribunales de Cuentas.

La corrupción se estableció en el sistema con una normalidad que a nadie parecia extrañar, incluso los ciudadanos veían en ella algo cotidiano y consustancial al poder, los partidos se limitaban a tapar el escandalo de turno con alguna declaración formal como la elaboración de algún Código ético y así hasta el próximo escandalo.

Los escandalos adquirieron también su burbuja, pues cada vez eran de mayor envergadura y atrapaban a todos por igual, los de un partido y los de otros. De esa forma se llego al punto de no retorno justo cuando vaciaron la caja, empieza aqui la burbuja de mentiras con ayuda del poder mediatico también comprado, cuando no el pacto entre sinverguenzas de los partidos implicados.

Pero lo que era algo imparable estalló porque todas las burbujas llegan a un punto en su altura que tienen que estallar porque las leyes naturales son así de lógicas. Se produce la crisis, más madera, apaguemos el fuego, silencio, cortinas de humo etc… Nada es posible cuando el ciudadano no solo contempla el espectaculo sino que lo sufre en sus propias carnes ¿Es la crisis ese espacio en el ciclo de un proceso de cambios? Así lo ha sido siempre y por tanto nadie puede negar que los cambios van a venir de la mano de los ciudadanos porque de lo contrario no saldremos de la crisis, eso es la crisis, una especie de parada de autobús para coger otro autobús, no para seguir en el mismo.

Los episodios de saqueo de las Cajas de Ahorro, instituciones, organismos y empresas públicas no se han saldado con soluciones que pudieran albergar esperanzas de cambio en un régimen moralmente podrido, se sigue en las mismas y comienza otro proceso natural que es la acción-reacción, pues ya no sirven las mentiras ni el engaño, esa burbuja estalló, entiendanlo estamos en el proceso “Crisis” y eso significa que se tienen que eliminar todo tipo de comportamientos que nos llevaron a ella, es condición indispensable para salir de este proceso.

Por tanto, a nadie extrañe que se produzcan fenómenos como el de Sanchez Gordillo asaltando supermercados, ciudadanos ocupando pisos, clientes pertrechados en los bancos y el pueblo rodeando al Congreso. No debe extrañar porque si el proceso no se encauza de manera ejemplar y se restablece la moral, el elemento acción-reacción seguirá funcionando. La solución consiste en que no se puede hacer pagar a los ciudadanos lo que han causado aquellos que bien activa o pasivamente permitieron que se llegara hasta aqui, ahora todo pasa porque los culpables sean procesados y el régimen que los toleró sea finiquitado, pues representan el fracaso moral, económico, social y político y son el elemento a eliminar para la salida de la crisis. Para ello, sólo queda un poder que no es el poder judicial, denostado e infravalorado por los ciudadanos al que vemos como un componenete más del régimen corrupto, ahora el único poder capaz de restablecer la moral es el poder ciudadano, si esto se consigue, no solo se habrá salido de la crisis sino que se habrá logrado el restablecimiento de una verdadera democracia, de una democracia real.