Hoy comenzamos el programa hablando sobre la crisis política en Venezuela. Juan Guaidó se ha autoproclamado como presidente encargado de Venezuela en franco enfrentamiento contra Nicolás Maduro. La nueva derecha de Donald Trump y Bolsonaro ya se ha alineado con Guaidó y el resto del mundo va tomando posiciones. Entre medio, el desastroso estado económico del país, la posición que tomarán los militares y petróleo. Mucho petróleo. En segundo lugar, hablamos sobre la última encuesta electoral publicada por el ABC y La Razón. Parece que habrá mayoría de derechas en España. Con Juan Carlos Barba y Carlos Allué. Conduce Koldo Sandoval.
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És un plaer tornar a sentir al Mestre Allué. Salut, força i màquina avant.
Una xicoteta reflexió: no hi ha vida dins de les institucions, no hi ha eixida possible. Tots els partits, sindicats, organitzacions, “intelectuals”….. que es presten al joc d’aquest règim acaben o bé formant-ne part o pitjor, acaben devorats pel monstre. Hi deu haver vida fora, maneres d’organitzar-se, de desobeir, de mostrar solidaritat amb els teus iguals, de cercar camins en comú que no tinguen que passar per formar part de la bèstia que tot s’ho engul.
Salut!
Sin duda: grande, Allué.
Sin desmerecer para nada al resto de honorables contertulios, que han estado muy bien, se echa de menos al muy apreciado Pedro García-Bilbao en este programa.
Por cierto que sería muy interesante que contactarais de nuevo con Agustín Otxotorena como hace un par de años.
Gracias a todos, un saludo.
Tengo cariño a la emisora y siento la crudeza y acidez de los comentarios que voy a compartir, pero he llegado a un punto de cabreo con el tratamiento derechizante de la actualidad en Venezuela y Cataluña que paso de contenerme. Hace tiempo que es lo único de BR que escucho es Debate Directo (junto a Ampliando el Debate, dependiendo de la temática) . Lo hago exclusivamente por el placer de escuchar a Carlos Allué, una de las pocas mentes libres y analíticas que van quedando, y conste que no comparto su escuela de análisis de corte marxista. Sorprende, sin embargo, con contadas excepciones como la del citado Allué, la cantidad de colaboradores auto-escucha y economistas sobrevenidos que sin conocer la relación entre el rendimiento y el precio de un bono se atreven a vaticinar cataclismos económicos fruto de causas tan variopintas como las fluctúantes criptodivisas. Y esto, por no seguir con algunos replicantes de redes sociales y hasta todólogos de tasca con más voluntad que criterio propio.
En relación a Venezuela, el manido y equidistante “no apoyo una intervención de EEUU, pero hay que ver lo malo y autoritario que es Maduro”, es, como también explicaba alguien en las redes, de manual de primero de colaboracionismo. Viene a ser como la afirmación de los familiares de aquel famoso maltratador, cuando tras mostrarles un periodista el retrato de la maltratada -que era un auténtico poema-, tuvieron la ocurrencia de decir: “lo que no habrá hecho esta mujer para tener que ponerle la cara asín”. Hablar de déficits democráticos en Venezuela ¡desde la España colonial, ahí es nada! y achacar exclusivamente a Maduro la escasez de ciertos productos o la hiperinflación, sin un mínimo análisis contextual, ni endógeno ni exógeno, es un recurso demasiado facilón. Se llega entonces a la explicación todológica de que todo mal tiene un culpable. Culpable que, infaliblemente, es el gobernante de turno, como antes lo fuera su predecesor, aunque ya no nos acordemos. Y todo ello, -por no haber transmutado el “régimen productivo”- (un clásico de la casa, del que nadie en ella parezca conocer muy bien ni su qué ni su cómo). Sistema productivo venezolano, por cierto, en manos de una oligarquía extrema. Sistema que, para mayor deleite del oyente, se sugiere acto seguido nacionalizar. Eso sí, con exquisitez democrática y sin cabrear al matón del Norte, no vaya a ser. Caballeros: no quieran acostar a Pareto con El Ché que difícilmente van a lograr que amanezcan juntos.
Para quien disponga de 20 minutos y busque otra perspectiva de lo que ocurre en Venezuela le propongo el siguiente vídeo.
https://youtu.be/GHc7yegaCmc
Obviamente, se trata de una perspectiva con sesgo ideológico y muy de parte, pero al menos ofrece un relato bastante más plausible que el habitual ejercicio de realismo mágico sobre la crisis venezolana en los medios habituales, lo que viene resumiéndose en algo así como la peor crisis de la Historia mundial causada por un dictador que además no sabe ni dictar.
Saludos,