El Gobierno acaba de defender por escrito la viabilidad y seguridad de losproyectos de fracking, pero la normativa que regula la implantación de esta técnica energética aún en fase de desarrollo no garantiza que dispongan de un informe previo de riesgo sísmico con resultado favorable. Por ahora, el Ejecutivo está impulsando una regulación de los sondeos que facilita el desarrollo de esta técnica en España, a pesar de la fuerte oposición que está encontrando. Su gran impacto en el entorno natural (consiste en la obtención de gas alojado en el subsuelo mediante la fracturación hidráulica de la roca en que se encuentra encerrado) ya ha provocado el rechazo de asociaciones ecologistas e incluso de Gobiernos autonómicos como los de Cantabria y Cataluña.
Sin embargo, el Ejecutivo defiende que se trata de una técnica segura. Así lo ha expuesto en el Congreso y así consta también en su respuesta a nueve preguntas por escrito sobre el asunto presentadas por varios diputados del Grupo Parlamentario Socialista. “El Gobierno está aplicando un criterio de precaución y cautela en la autorización de los proyectos de investigación o exploración para la obtención de hidrocarburos por fractura hidráulica (fracking). Con este propósito, se ha decidido que todos estos proyectos se sometan a una evaluación ambiental”, asegura el Ejecutivo en las nueve contestaciones. Pero la seguridad del fracking tiene una vía de agua. La normativa que regula las declaraciones de impacto ambiental no exige que estos proyectos deban estar sometidos obligatoriamente a una evaluación de su riesgo sísmico, por lo que podrían salir adelante sin que se valore esa amenaza….TEXTO COMPLETO