Los niños de Picón deben pedir autorización al ayuntamiento para jugar en la calle

La casta cada vez está peor

Surrealista y sorprendente. Esa es quizá la definición más aproximada de la nueva ordenanza que el Ayuntamiento de Picón quiere aprobar para un pueblo de 600 habitantes, rural y eminentemente en agrícola, aunque quizá deba dejar de serlo si los agricultores no se pueden subir ni a los árboles para podar olivos, almendros u otro tipo de árboles en todo el término municipal, incluido el campo.

Aunque la ordenanza aún no se ha aprobado -y muchos vecinos esperan que no se haga- lo cierto es que su mera propuesta ya ha despertado el malestar entre algunos que no entienden, por ejemplo, que se intente prohibir practicar juegos en el espacio público -tendrán que aprovechar las consolas en casa- o que para cualquier juego de pelota o monopatín de los niños en cualquier espacio público de la localidad deban tener la previa autorización del Ayuntamiento, con lo que los padres se verán obligados a solicitar dicho permiso en el consistorio -o si no es en horario de oficina, en la propia casa del alcalde- como si se tratara de una manifestación.

“No tiene ni pies ni cabeza. Nuestros chiquillos que siempre han jugado en la calle, ¿ahora no van a poder hacerlo porque lo diga el alcalde”, indicó a Lanza una vecina de este municipio.

Pero es que la propuesta de ordenanza incluye muchos otros despropósitos que, si se refirieran a una gran capital no lo serían tanto -por eso hay quien duda de que no se haya copiado de otro lugar- como prohibir el tendido de ropa, una costumbre muy arraigada en la localidad para aprovechar los rayos de sol, prohibir colocar macetas en los alféizares de las ventanas o balcones o tener pollos y gallinas en los corrales.

http://www.lanzadigital.com/actualidad/los_ninyos_de_picon_deben_pedir_autorizacion_al_ayuntamiento_de_para_jugar_en_la_calle-56932.html

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