Programa Economía Directa de Burbuja Radio que trata la actualidad económica, en esta ocasión: La reforma laboral a fondo con Ángel Martín Y Manuel Polavieja conducidos por Juan Carlos Barba.
Programa Economía Directa de Burbuja Radio que trata la actualidad económica, en esta ocasión: La reforma laboral a fondo con Ángel Martín Y Manuel Polavieja conducidos por Juan Carlos Barba.
Otra forma de verlo
http://laboro-spain.blogspot.com/2012/02/traduccion-de-la-nueva-reforma-despido.html
http://laboro-spain.blogspot.com/2012/02/reforma-laboral-al-detalle-el-nuevo_13.html
http://laboro-spain.blogspot.com/2012/02/reforma-laboral-al-detalle-el-nuevo.html
Bajo el sistema capitalista no se va a solucionar nada, gracias por los audios y un saludo.
Se puede seguir proyectando ejemplos de la “autorregulación” al comprobar que el hambre de los lobos se resuelve perfectamente aumentando la natalidad de las ovejas. No entiendo entonces orqué Colectivo Burbuja se queja de los resultados de la “autorregulación” libérrima de la circulación de los capitales.
Lo más grave de esta tertulia de hoy es que se está proponiendo reducir drásticamente condiciones de la relación laboral, para decir que hay que resolver las consecuencias de la crisis económica, cuando la crisis económica ha sido incuestionablemente ocasionada por la gestión de todos los ejecutivos financieros, políticos y empresariales. Sin embargo estos ejecutivos ni han reducido globalmente ni van a reducir sus márgenes de privilegios y beneficios.
En mi opinión, sobre empleo, hay que atajar radicalmente el problema con la “responsabilización” general de los actos y omisiones en la empresa, tanto de trabajadores como de empresarios. En este sentido me parece que el Comité de Empresa podría tener una función crucial.
Hay que responsabilizar mucho más de los resultados de su trabajo a las personas que trabajan, tanto en negativo como en positivo y de forma garantizada. Pero igualmente -y por más motivo- al colectivo empresarial para que asuma que la empresa no es su cortijo sino un espacio social que debe de contar con la colaboración de las instituciones, de las personas que trabajan y de las personas clientes de sus productos y servicios.
El mayor problema de los embudos selectivos que pregonan muchas competiciones deportivas, científicas, sociales, proponiendo premiar solo al mejor y amenazando que los demás van a ser unos desgraciados, es que se genera tanta basura social imposible de reciclar que a los ganadores solo se les ocurre que lo mejor es exterminar a los perdedores para limpiar su imperio. Estamos ya cerca de que ese criterio se extienda como durante los años treinta y eso es muy grave.
Creo que esta reforma laboral no es más que un siguiente paso, junto con las reformas económicas, para fatigar, desmoralizar y dividir más aún a nuestra sociedad. Así nos podremos vender más barato. Creo que hay que insistir en capacitar a la población -y en este caso del empleo- a trabajadores y empresarios, de que hay que exigirse la máxima corresponsbilidad para sacar adelante los productos y servicios que la sociedad necesita y que puede adquirir.
Si para ello hay que reinvertir en la empresa la mitad de salarios y de beneficios actuales pues habrá que hacerlo.
Ahora bien. Esta reforma está claramente enfocada para despedir, en empresas e instituciones públicas, a una buena parte de contratos fijos “bien pagados” (por ejemplo hasta dos millones de empleos) y con esa masa salarial contratar a hasta tres millones de empleos cobrando mucho menos, mientras todos los trabajadores se van poniendo firmes y a la voz de los caprichos del jefe.
Así, para 2013, se irá viendo una mejora del empleo (de unos tres empleos por cada dos despidos) sumando que la presión contra la masa de desempleados va a adelgazar también las estadísticas del paro.
Todo un éxito político incuestionable, tanto para la población que ha votado al partido gobernante, como -esto es lo fundamental- para los verdaderos gobernantes de Europa, desde el Eje de Berlin.
Julio, nada tiene que ver la “autorregulación” cuando esta se produce de forma voluntaria entre las partes a cuando esta se produce con violencia y/o coacción de por medio como en el ejemplo de los lobos y las ovejas.
Por mi parte yo en absoluto hablo de reducir las condiciones laborales, sino de que estas sean libremente acordadas por empleado y empleador.
Desde luego los empresarios que gozan de una regulación privilegiada (banca, eléctricas y otras grandes empresas) son los que menos sufren la crisis. Pero estos son una minoría de empresarios. La mayoría de emprendedores ni gozan de grandes privilegios ni beneficios ni se están librando de la crisis. Muchos quebrarán, si es que no han quebrado ya.
Por otro lado, los derechos actuales de los trabajadores son una farsa. Las pagas extras, la indemnización por despido, las vacaciones pagadas. Todo va descontado del salario, como es natural.
Todo esta legislación absurda no es más que una justificación para parasitar a emprendedores y trabajadores por parte de políticos, sindicatos y patronal.
Manuel, esta reforma laboral es una devaluación interna pura y dura. No es más que bajar salarios para equilibrar la balanza de pagos. Pero el precio va a ser alto. Las devaluaciones internas son costosas. Va a aumentar el paro, no a disminuir. Sólo si se alcanza un superávit comercial, si se empieza a desendeudar el país, con el paso de muchos años, puede llegar a mejorar el empleo.
En el terreno laboral, apoyo la reforma de FEDEA de indemnización por despido creciente, que elimina la dualidad. Es más razonable para el empresario aceptar una indemnización por despido que crezca conforme la relación dura más, y por tanto aumenta la confianza mutua.
Y en el de la balanza de pagos, el principal problema de España, más que de competitividad, es de asignación incorrecta de recursos. Hay unas pocas empresas que son tan competitivas como cualquier empresa sueca o alemana, y que están exportando mucho. Si el crédito que está en manos de, por ejemplo, inmobiliarias zombies, lo tuvieran a su disposición, podrían crecer. Por tanto, pienso que las protecciones a estos sectores establecidos (desgravación por compra de vivienda, ley de Sociedades Anónimas para que inmobiliarias zombies no tengan que quebrar, …) son el principal lastre para la balanza de pagos.
Para ver lo que traerá esta reforma, fijaos en el caso de Portugal.
Reforma labora con indemnización de 15 días por año, impuesta por FMI. Contracción de la economía de caballo, espiral deuda/deflación. La balanza de pagos ha tenido una corrección grande, sí, ahora tienen la mitad de déficit que antes, pero el ratio deuda/PIB es cada vez mayor. Deuda calificada como bono basura, con una rentabilidad del 12 % en el bono a 10 años.
Bueno, Manuel, si confías en esa reforma, vete corriendo a comprar bonos portugueses al intermediario financiero que sea de tu confianza, ¡te harás millonario!
Ok Manuel, tú dices que las condiciones laborales sean “acordadas por empleado y empleador”, ahora bien ¿Esto es posible dentro de las relaciones capitalistas de producción? Objetivamente, la relación capital-trabajo en el capitalismo es asimétrica, por lo tanto, desigual. Por lo que, pedirle “acuerdo democrático” a una relación determinada de antemano por el mercado necesariamente debe de romper (en el sentido de criticar los fundamentos del modo de producción) con el sistema imperante.
Salu2
Ramón,
En absoluto confío en esta reforma. La legislación laboral me parece absurda antes y despues de la reforma. En cuanto a la indemnización por despido da exactamente igual como la montemos porque siempre será un pasivo latente para el empleador, y de forma más o menos consicente lo acabará descontando siempre del salario.
Fran, no veo esa relación asimétrica. Un trabajador siempre está en posición de decir que no a lo que le ofrece el empresario.
Gracias por tu respuesta.
Una cierta indemnización por despido da cierta estabilidad en la relación laboral. La inestabilidad es un veneno potente en las relaciones humanas. Lleva al trabajador a desviar recursos útiles, por ejemplo, en buscar otro trabajo. Es algo que hay que graduar, desde luego. Además, el trabajador tienen información asimétrica, sabes más que el empresario de lo suyo, sobre todo si está especializado. Entonces, si no tiene incentivos a largo plazo (indemnización por despido) va a ser un vendedor de humo. Es más, en un entorno competitivo y duro, va a tener que serlo o no sobrevivirá. Recuerda que esta crisis fue provocada en USA por banqueros que duran poco en su puesto, por lo que se afanaron en presentar resultados buenos que no eran reales para así cobrar bonuses.
Por eso, hay empresas que dan voluntariamente indemnizaciones por despido altas para involucrar al trabajador. Naturalmente, esto tiene que basarse en una relación de confianza mutua que se tiene que establecer con el tiempo. Por eso, la indemnización progresiva que propone FEDEA me parece adecuada.
No se trata de ganar más o menos, sino del tipo de relación que se desea fomentar, del grado de competitividad que se quiera tener.
Además, un exceso de competitividad genera externalidades negativas. Ej. padres que no tienen tiempo para estar con sus hijos, muchos de ellos pueden acabar drogadictos o no bien educados. Esto tiene un coste social colectivo (inseguridad, …).
La competitividad y la estabilidad son buenas en un cierto grado. En exceso, son contraproducentes.
Ojo, que yo no digo que no tenga que haber indemnización. Digo que sea la indemnización que sea saldrá de lo que produzcan el trabajador y la empresa de forma conjunta.
Lo que yo defiendo es que empleador y empleado acuerden mutuamente las condiciones que que mejor satisfagan a ambos. Y en esas condiciones estarán incluidas horarios, indemnizaciones, vacaciones, remuneración….
Pero no veo que nadie tenga que imponer ninguna condición desde fuera de esa relación. De tales imposiciones los únicos beneficiados son los impositores (Patronal, Políticos, sindicatos) y los perjudicados los trabajadores y los emprendedores.
Manuel, por el contexto creo que está claro el objetivo de esta reforma: favorecer la bajada de salarios. Probablemente esto es inevitable, está claro que vivíamos por encima de nuestras posibilidades. Pero va a provocar muchas quiebras hipotecarias, muchas contraídas de buena fe, de gente cuyo único pecado fue no informarse en fuentes alternativas como esta y creerse lo que todos los medios decían. Por tanto, hace falta un mecanismo claro de quiebra familiar, que permita empezar de cero. Sólo UPYD incluyó en su programa una propuesta concreta de suspensión de pagos de particulares.
Además, un ajuste por devaluación interna tendrá un coste tremendo. Provocará una caída de la demanda interna y más paro. (Al que piense otra cosa, le recuerdo que tiene una magnífica oportunidad de inversión en los bonos portugueses a 3 años, con una rentabilidad del 12 % anual). Para minimizar su coste debería haber una apuesta clara por la educación y la investigación, para obtener producción de alto valor añadido, y no limitarse a competir en salarios con Tailandia. Además de una quita de deuda.