Estamos asistiendo en este año que se acaba a las peores muestras de periodismo amarillo que recuerdo en España. La historia de la prensa amarilla es antigua y se basa en el recurso a los peores sentimientos que albergamos las personas. Tuvo su origen en los EEUU a finales del siglo XIX y el término procede de la acepción de yellow, que significa también cobarde. Y de cobardía es de lo que estamos hablando en el tratamiento que los medios de la derecha en general están haciendo de de los ayuntamientos dirigidos por las candidaturas populares.
Hablaré aquí de la reciente polémica surgida por un artículo publicado por Vozpópuli, un diario digital fundado con pretensiones serias por iniciativa de Jesús Cacho tras su salida accidentada de El Confidencial. Sin embargo, este diario ha entrado rápidamente en una deriva amarillista cuyo mejor exponente es un artículo sobre nuestro compañero y colaborador de CB Carlos Sánchez Mato que apareció recientemente y que me niego a enlazar para no generarles visitas. Si alguien tiene interés en leer una muestra lamentable de mal periodismo puede buscarlo en Google. Leer esto como si fuera periodismo es como decirle a un cinéfilo que se vaya a ver una película gore de serie B y pedirle que se crea que eso es cine del bueno.
Sin embargo sí que enlazaré la réplica que Carlos dio en su blog. Aquí está: Réplica de Carlos
La modestia de los medios que tiene Carlos para tratar de combatir toda esa serie de penosas mentiras que atentan contra su dignidad y su honor debe hacernos reflexionar sobre la catadura moral de la gentuza que controla la mayor parte de los medios de comunicación, que no respetan ningún límite en su afán por continuar saqueando el país a placer, como llevan haciendo casi desde siempre. ¡Mucho ánimo, Carlos!
Fotografía de eldiario.es
Carlos, de lo más inteligente y honesto que hay. Mucho ánimo.