¿Es la bajada de salarios la solución?

 

A pesar de que la Troika basa toda su estrategia en que es así, sin embargo hay muchas razones para creer que se equivocan

 

Es bien sabido que los salarios subieron durante muchos años, y hasta el estallido de la crisis en 2007, mucho más en países como España, Francia y Grecia que en Alemania. Al tiempo que pasaba esto se generaron enormes desequilibrios comerciales en la Eurozona, llevando a estos países con equilibrio o superávit en su balanza de pagos a enormes déficits y a Alemania a un gigantesco superávit. Puesto que la única razón aparente para que haya ocurrido tal cosa es toda la batería de medidas puestas en marcha en Alemania para controlar los costes laborales, simplemente se ha atribuido la génesis de los desequilibrios y por tanto de la crisis de la Eurozona a este motivo y se postula desde un lado (la Troika) que bajando los costes laborales en los países en crisis se solucionará el problema y desde el otro (economistas de la demanda) que subiendo los costes laborales en Alemania también se solucionaría. Los ciudadanos del Sur obviamente se resisten a tan dolorosas medidas y están resentidos contra los que defienden –Alemania– que ellos han actuado correctamente y que son los demás los que les deben imitar.

De momento, y como publicó hace pocos días FT Alphaville, Alemania parece estar saliéndose con la suya, para regocijo de la Troika. Esto es lo que vemos en el gráfico.

Como se ve, en los últimos cuatro años los salarios en Grecia han bajado casi tanto como lo que subieron en la década anterior, en Portugal más del doble, y en Irlanda y España llevamos recorrido la mitad de este supuesto virtuoso ajuste.

Pero si un observador atento se preocupa de analizar con atención el gráfico inmediatamente empezará a notar que hay cosas que no cuadran:

 

-Si los salarios en Portugal sólo subieron un 3% por encima de la media, ¿cómo es posible que tuviera el segundo peor déficit por cuenta corriente de la Eurozona?

 

-Si los de Italia subieron igualmente sólo un 3% por encima de la media, ¿por qué tiene tantos problemas (y hasta hace poco uno de los mayores déficits corrientes del mundo?

 

-Y lo que es mucho peor, si en Holanda subieron un 10% por encima de la media, ¿cómo puede ser que tenga un enorme superávit comercial y en la balanza de pagos?

 

A un servidor, que toda su vida ha trabajado en el mundo de la Ciencia, le enseñaron que si uno elabora una hipótesis y hay un solo dato que la contradiga, eso significa que la hipótesis es falsa. Y aquí, como en los pasatiempos de “encuentre las diferencias”, en menos de un minuto hemos encontrado tres.

 

Entonces, ¿qué puede haber pasado? La respuesta por desgracia es mucho menos amable de lo que le gustaría a la Troika o a los economistas progresistas. Esto es lo que vemos en el siguiente gráfico que mide los costes de producción en Alemania y España. ¿Dónde se encuentran después de 16 años desde la última devaluación? Pues exactamente en el mismo sitio que en 1997.

Lo que ha pasado es que sencillamente la industria alemana, especializada en productos de alta tecnología, se ha adaptado mucho mejor que la de los países del Sur a la globalización. Mientras que ellos venden a los ricos de los emergentes sus Audis, BMWs y Mercedes y montan fábricas por doquier en esos mismos países nosotros tenemos una industria obsoleta que sobrevive a duras penas compitiendo con lo que producen esas fábricas que montan los alemanes. Esta realidad, por desgracia, significa que el problema no tiene más solución que un empobrecimiento brutal de los países del Sur –que los ciudadanos no van a tolerar–, un mecanismo creciente de transferencias –que los alemanes no van a aceptar– o la ruptura del euro –la cual no quieren ni imaginar los eurócratas. Como vemos, un problema irresoluble.