La crisis económica ha generado una nueva carencia en los hogares españoles, la denominada “pobreza energética”, que hace que numerosas familias no tengan recursos para calentar sus viviendas.
Así, según el Observatorio de la Sostenibilidad en España (OSE), el diez por ciento de los hogares no puede mantener su casa en condiciones adecuadas de temperatura durante el invierno.
En el caso de las familias atendidas por Cruz Roja Española, esta cifra se dispara hasta el 43 por ciento y hasta el 54 por ciento en el caso de las personas mayores, una situación que, según ha señalado esta organización en una nota de prensa, se ha convertido “en un problema de primera magnitud”.
Cruz Roja denuncia que la bajada de las temperaturas, el encarecimiento de la energía, la antigüedad del parque de viviendas y la reducción de los ingresos, ayudas y subsidios, agravan “alarmantemente” la pobreza energética, es decir, la incapacidad de un hogar de mantener su vivienda con una temperatura de entre 18 y 20 grados en invierno y de 25 en verano.
Ante esta situación, y dada la bajada generalizada de las temperaturas que estos días tiene lugar en toda España, Cruz Roja ha reforzado su acción frente a la pobreza energética con el llamamiento “Ahora + que nunca”, que tiene por objetivo incrementar, entre 2012 y 2013, la atención a 300.000 personas más que se encuentran en situación de extrema vulnerabilidad entre 2012 y 2013, además de los dos millones de personas que ya atiende anualmente.
Entre las medidas que se potencian se encuentra el reparto de alimentos (un millón de personas atendidas en 2012), el refuerzo escolar a los más pequeños, la distribución de kits de emergencia social, vestuario y enseres, el apoyo sociosanitario en asentamientos y núcleos deprimidos, los puntos de información sobre empleo o las ayudas económicas de carácter puntual.
Respecto a la “pobreza energética”, Cruz Roja está difundiendo medidas y consejos para el ahorro energético y de dinero en calefacción, con el fin de mantener la vivienda en unas condiciones de climatización adecuadas para la salud.
Además, en casos puntuales de extrema vulnerabilidad, Cruz Roja concede ayudas para el pago de facturas de luz o agua, de alquileres o para la compra de sistemas de calefacción adecuados, así como el reparto de mantas, estufas o kits de higiene.
Cruz Roja ha recordado que ahora, el descenso de temperaturas, tiene un grave impacto en las personas más vulnerable ya que el frío y la humedad permanente en un hogar pueden llevar a serios problemas respiratorios como asma, bronquitis u otras enfermedades.
Además, estas condiciones constituyen una de las causas del aumento de la mortalidad causada por enfermedades cardiovasculares y respiratorias entre personas mayores de 60 años durante los meses de invierno.
En este sentido, recuerda que según estimaciones del OSE, la pobreza energética podría estar siendo causa en estos momentos de más muertes prematuras que los accidentes de tráfico en carretera, siendo los más afectados los niños y ancianos de las capas desfavorecidas.